Por fin llegó el día de conocer lo que los Trolls han hecho por estos lares (escaleras).
Salimos de Molde a las siete de la mañana, pensando que eran las ocho, "un fallo lo tiene cualquiera"; pronto nos reencontramos con túneles y puentes.
Seguidamente empezamos el periplo de transbordadores que hoy nos tocaba utilizar. El primero de Afarnes a Solsnes, trayecto corto y tranquilo.
Los paisajes, como todos los días, son muy bonitos.
Tomamos el segundo transbordador de Eidesdal a Linge, un poco más largo el trayecto pero igual de tranquilo.
En seguida nos adentramos en las montañas a través de la famosa "carretera de los Trolls".
Nos fuimos acercando a la escalera e iniciamos la subida.
Hay que reconocer que tuvieron mucho trabajo los Trolls, impresiona tanto desde abajo como desde arriba.
Fijaros en cómo se quedó éste de tanto trabajar. Continuamos por el altiplano y nos topamos con unas ovejas tomando el sol.
Pasado el altiplano comenzamos la bajada al fiordo de Geiranger.
Y como no hay dos sin tres, tomamos de nuevo un transbordador; esta vez grande y de una hora de duración. Nos tomaron el pelo y nos metieron en el transbordador turístico, más caro; eso sí , por los altavoces nos fueron dando detalles de las panorámicas en cuatro idiomas incluido el español.
Subimos y bajamos montañas, rodeamos fiordos y llegamos al valle desde donde escribimos en Vassenden.
Mañana más. Esperamos que el tiempo nos acompañe como hoy, soleado y una media de 13º.
No hay comentarios:
Publicar un comentario